La lactancia materna es la forma natural de alimentarse el bebé, no debería ser difícil… ¿o sí?
Lo cierto es que muchas madres quieren dar pecho, pero en demasiadas ocasiones no lo consiguen.
En España, se estima que llegan a los 6 meses con lactancia materna exclusiva un 28 % de bebés; mientas que la inician cerca de un 80 %. Estas cifras se basan en encuestas de salud, porque, aunque parezca increíble, no hay datos oficiales de tasas de lactancia materna (fuente de información: Comité de Lactancia Materna de la AEP: Lactancia materna en cifras).
Los puntos más importantes para una lactancia materna son:
Uno. Ponerse el recién nacido al pecho lo antes posible tras el nacimiento.
Está demostrado que el contacto piel con piel después del parto ayuda a establecer el vínculo afectivo madre-hijo y fomenta el inicio de la lactancia.
En las primeras horas tras el parto tanto la madre como el recién nacido están en un estado de alerta, que hace que sea el momento idóneo para que empiecen a reconocerse, y el bebé busque el pezón y haga la primera toma.