Si tu hijo no quiere cenar, ¿qué haces?,
¿le pones la tablet a ver si así come algo?, ¿le preparas tres cosas diferentes?, algo le gustará,
¿le das unas vitaminas que le abran el apetito?, ¿se va a dormir sin cenar?, …
Sigue leyendo y te diré que puedes hacer.
Empiezo por un caso real visto en la consulta hace poco: Niño de 2 años que la madre dice que no cena.
Ha merendado a las 5 y media de la tarde: sándwich de crema de cacao (180 Kcal) + batido de leche (120 Kcal). Pero es que además, ya de camino a casa (casi a las 7 de la tarde), aún se ha comido un par de galletas (60 Kcal más). Total merienda: 360 Kcal.
¿Creéis que este niño puede tener hambre a la hora de la cena? Es más, ¿le va a apetecer comer un filete de pescado con algo de verde (ensalada, o brécol) después de haberse zampado todo ese azúcar en la merienda?
Y cuando pregunto: ¿qué ha comido el resto del día?:
Desayuno: bibe de 240 ml de leche con varias cucharadas de cereales (170 + 150 Kcal = 320 Kcal)
Almuerzo: bocadillo pequeño de jamón cocido (150 Kcal)
Comida (en la guarde): pasta (150 Kcal) + pescado (150) + yogur (90-100 Kcal, porque es un yogur azucarado, de «sabor» a…)
Todo ello con la merienda suma 1230 Kcal.
Las necesidades estimadas promedio para un niño de esa edad, y una actividad física normal, es decir, bastante movidito, son entre 1100-1300 Kcal.
Es muy posible que ese niño no quiera cenar porque no lo necesita.
Pero además, todo eso que ha comido es poco saludable. Poca verdura y fruta y demasiados procesados (crema de cacao, pan blanco, batido, los cereales)
Esto no es tan excepcional. Pasa demasiado a menudo.
Así que, primera conclusión:
Muchos niños que no cenan, o cenan muy poco, es porque no lo necesitan. No tienen hambre.
Así que, si tu hijo no cena por haber merendado mucho o tarde, pero habiendo comido cosas saludables, pues no es problema. Puedes ofrecerle algo ligero: unos trocitos de fruta, un yogur sin azúcar,… es posible que coma algo. Y si no, no pasa nada.
Pero muchas veces, no cena porque ha merendado cosas muy calóricas, y poco saludables. En ese caso sería recomendable cambiar eso. El problema de las meriendas (y desayunos) os lo explico en este artículo: Desayunos y meriendas. 4 cosas que debéis saber los padres.
¿Y si no cena y se despierta por la noche con hambre?
Puede pasar, pero no es frecuente. Si ha consumido bastantes calorías a lo largo del día, ya es raro que por la noche el hambre le despierte. Pero sí es cierto, que si ha comido muchas cosas azucaradas (batido, galletas,…), el metabolismo de todo ese azúcar, hace que tenga episodios de hambre con más frecuencia.
En este caso, lo que habría que cambiar es lo que come para merendar. Y bueno, en el resto de comidas también.
Consejos si queréis que vuestro hijo cene
Se pueden resumir en uno: que llegue con hambre a la cena.
Algunas sugerencias:
- Merienda más ligera y saludable: fruta y yogur por ejemplo, (que además, se digieren más rápido).
- También puede merendar un bocadillito de pan (mejor integral) con algo como: queso, tomate natural, humus, crema de cacahuete natural sin azúcar,…
- Si hace deporte y necesita algo más potente, podéis darle ofrecerle: Frutas como plátano, aguacate,… O un puñado de frutos secos (en menores de 4 años siempre molidos).
Que «no le gusta la fruta». Leeros esto: «No quiere verduras, … y fruta poca»
Y, ¿qué pasa si aún así no quiere cenar?, ¿es «imprescindible» la cena?
Pues no, no lo es. En realidad ninguna comida del día es «imprescindible».
Lo importante lo que come en el total del día.
Si no cena porque ha comido mucho el resto del día, pero ha comido cosas saludables, pues no pasa nada.
Lo que no hay que hacer
- Como no quiere cenar, pero unas natillas (o cualquier postre azucarado) siempre las acepta, aunque no tenga hambre, pues le damos eso.
Mi consejo: más vale que no cene, a que se coma cualquier cosa no saludable.
No le va a pasar nada por no cenar.
- Convertir la cena en una pelea. Nunca hay que forzar u obligar a comer a un niño.
Si creéis que vuestro hijo no come lo suficiente, empezad por aquí: «El niño que no come»
Un consejo más:
la cena es un buen momento para compartir en familia. Poned en la mesa alimentos sanos, y algo picará. Disfrutad de la cena todos juntos.
Algunas referencias:
Kid’s Healthy Eating Plate. Harvard Public Health School y mi explicación para padres aquí: Plato de Harvard para niños. Instrucciones de uso.